En esta nueva década tenemos que tener en cuenta que la experiencia del cliente es indispensable a la hora de realizar la compra. Las expectativas del cliente a la hora de invertir dinero y tiempo en nuestro producto han cambiado, ahora espera unos ciertos mínimos, como puede ser calidad o el buen trato. Para diferenciarnos del resto de las marcas debemos utilizar la experiencia, que actúan como motor para la toma de decisiones. El marketing ha cambiado, pasando de ser tradicional a uno más experiencial.
El marketing experiencial según Marketing Directo es “la estrategia o filosofía de crear experiencias para conseguir llegar al cliente de forma creativo y memorable mientras se consigue crear vínculos emocionales entre consumidores y marcas”
En este sentido, el foco ya no está en el producto, si no en el cliente.
Pasos para crear una acción de marketing experiencial
Realmente no existe una guía concreta sobre experiencias del marketing. Cada marca y público es diferente, por lo que tenemos que analizar es a nuestro público objetivo y descubrir que es lo que busca y quiere.
En segundo lugar, debemos establecer nuestros objetivos, es decir, qué queremos conseguir y a que target nos vamos a dirigir.
Más tarde, tendremos que crear la experiencia, que es la parte creativa de nuestra estrategia.
Por último, no debemos olvidar los costes, calcular el ROI y las métricas necesarias para ver si nuestra inversión es rentable.
¿Qué necesita cumplir una estrategia de marketing experiencial?
Según Hubspot, para que una estrategia de marketing experiencial tenga éxito, debe cumplir ciertos aspectos:
- Sensaciones: Debemos de centrar nuestros esfuerzos en estimular los sentidos de nuestro target, pero sin llegar a sobrecargarlos. Hay que elegir las más importantes y que cumplan con los objetivos de la campaña.
- Emociones: Cuando la persona tiene una experiencia positiva con la marca, se suele realizar una conversión. Lo importante es que exista una sensación positiva, y esto se puede lograr también a través de lo sensorial, la tranquilidad, la felicidad, el buen trato, etc.
- Vivencias: A esto nos referimos con qué le aporta en su día a día al consumidor. Nuestra marca tiene que ser acorde al estilo de vida de nuestro target, no puedes dirigirte a todo el mundo, debes enfocar el objetivo en tu público para que te identifica sin problema alguno.
- Pensamientos: Al utilizar la creatividad debemos de apelar a los procesos cognitivos para que la persona relacione al producto como algo positivo para que a la hora de la decisión de compra tenga esos criterios a su favor.
- Relaciones: Los seres humanos somos seres sociales por naturaleza, por eso, una buena experiencia de compra es la interacción, generando confianza y comunicación entre el producto y el comprador, creándose así una comunidad fiel a la marca. Estas relaciones interpersonales pueden ser de forma física o a nivel digital, por ejemplo, cuando un influencer recomienda la marca en sus redes sociales.
En definitiva, el objetivo es que la marca se convierta en algo tangible mediante la experiencia y que sea también de manera offline. Si consideramos que el 98% de los consumidores crea contenidos cuando atiende un evento, tiene sentido que añadamos elementos digitales para que puedan asociarlo a la marca, como puede ser un simple Hashtag.
Ejemplos de Marketing experiencial
Aquí os dejamos unos ejemplos de marcas que tuvieron bastante éxito con esta estrategia:
Mattel
Mattel creo una interesante actividad a través de un anuncio publicitario en el que varias personas pudieron jugar al Pictionary con el hombre del anuncio. Además, si ganaban se llevaban un premio. Esta acción estaba dirigida sobre todo a familias, que era el target que buscaba. A partir de ahí la imagen de empresa cambió y para muchos de sus clientes guardaron en su cerebro un recuerdo positivo de Mattel
LG
Toda la actividad ocurre en un ascensor, la marca reemplazó el suelo del ascensor por nueve pantallas IPS con un sistema de sonido para recrear el supuesto desplome del piso. La acción consiguió que fuera una experiencia difícil de olvidar para quienes estuvieron dentro del ascensor. Además, al poder grabar sus reacciones, fue bastante viralizado, llegando a miles de personas por internet.
Photoshop
La marca celebró el #CreativeDay con una campaña de street marketing en Estocolmo. En ellas varias cámaras ocultas fotografiaban a las personas en una parada de bus y en tiempo real eran tratadas por un diseñador siendo visualizada en las marquesinas. Todo fue grabado y además muchos de los participantes hacían fotos a sus retoques que probablemente lo subirían a sus redes sociales.
Disney
Ocurrió en un centro comercial, donde se pusieron pantallas donde se proyectaba cuando caminabas frente a ella, la sombra de un personaje Disney realizando las mismas acciones que la persona.
Después de reunir a una gran multitud frente a la pantalla blanca, las puertas se abrieron y los personajes de Disney salieron a saludar a los espectadores.
Esta estrategia logró divertir a miles de espectadores y crear la magia con la que siempre nos sorprende Disney.
Estos son sólo de algunos de los ejemplos de marketing experiencial que han logrado un gran impacto por su originalidad y su capacidad de sorprender a las personas.
¿Cómo plantearías una estrategia de marketing experiencial en tu negocio? ¿Lo ves posible? ¡Os leemos!
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